aniversario de la empresa de componentes para automóviles

Catelsa Cáceres cumple medio siglo

Nació en 1973 como extensión de su hermana en Guipúzcoa

La entidad celebrará un día festivo este sábado en Las Capellanías el que habrá representación institucional y estará presente el histórico de trabajadores

Trabajadores de la fábrica de Catelsa Cáceres.

Trabajadores de la fábrica de Catelsa Cáceres. / SILVIA SANCHEZ FERNANDEZ

Catelsa Cáceres cumple este sábado 50 años desde que arrancó su producción allá por 1973. Su nacimiento se produjo como extensión a su fábrica hermana en Guipúzcoa y 15 años más tarde se integró dentro del grupo francés Hutchinson. Después de cinco décadas, numerosos retos y nuevas aperturas en otros lugares como Campo Maior o Tánger, la entidad celebrará un día festivo este sábado en sus instalaciones de Las Capellanías.

Pese al tiempo que ha pasado desde que abriese sus puertas, tan sólo tres personas han dirigido la fábrica cacereña. El último en llegar, Jorge Gutiérrez, que apenas lleva un año en el cargo, recuerda con mucho cariño la labor de sus predecesores. «Marcelo Muriel fue director durante los primeros 40 años y fue una figura clave en todo este proyecto porque fue el que lo estructuró y dio forma a la empresa. Luego Jean Luc Wisniewski viene de otra fábrica de la multinacional y es una persona muy querida durante los nueve años que estuvo aquí. Ambos han hecho mucho porque seamos quienes somos ahora mismo», cuenta Gutiérrez, agradecido.

26 años han transcurrido desde que Gutiérrez entrase en Catelsa. Tras estudiar una ingeniería industrial en la Universidad de Valladolid, llegó a la entidad como becario. Después de pasar por puestos como la dirección de calidad, de logística, de compras o de producción, pasó tres años dirigiendo una planta en el País Vasco. Tras la jubilación de Wisniewski, le llegó la oportunidad de dirigir la fábrica de Cáceres.

Jorge Gutiérrez, director de la planta.

Jorge Gutiérrez, director de la planta. / Carla Graw

Con motivo del 50 aniversario, se celebrará un acto en el que habrá representación de la Junta de Extremadura, Ayuntamiento de Cáceres, Diputación de Cáceres o Universidad de Extremadura. Presentes también estarán todos los compañeros que trabajan allí y los que ya se han jubilado. Una visita guiada por las instalaciones de la planta cacereña, unas palabras por parte de los dirigentes y una comida informal frente a la empresa son algunas de las actividades que se llevarán a cabo.

Con respecto a la actualidad de la empresa, Gutiérrez indica que está en una situación de producción normal. «Está los niveles previos a la crisis de los semiconductores y la del coronavirus, es ligeramente inferior pero normal dentro del histórico». Cuenta con 234 trabajadores en plantilla más otra decena aproximadamente que están subcontratados de forma temporal. 

Pese a la evolución en el mercado, y los proyectos que se han debido acometer y dejar de lado en la planta cacereña, tienen tres familias de productos que son los más fabricados: El cableado, la conexión eléctrica que va dentro del vehículo; las columnas de dirección, lo que conecta la dirección del vehículo desde el volante hasta la carrocería; y el sistema de frenado. Además, también, han entrado en el mercado de los sistemas de ordeño para animales gracias a la patente que tiene en común con la empresa sueca DeLaval.

La exportación sigue siendo el principal cometido de Catelsa: A Francia, Portugal, Rumanía, Alemania o Inglaterra viajan prácticamente la totalidad de las piezas que se elaboran, mientras que un cinco por ciento de su fabricación lo envían a España.

Catelsa ya no es sólo una planta de producción. Con el paso del tiempo se ha convertido en una empresa dedicada al desarrollo, a la concepción de piezas, al desarrollo de materiales. Se ha convertido en un lugar que produce soluciones a necesidades de clientes. «Este aniversario lo estoy viviendo como un orgullo por poder representar a una fábrica en la que somos una gran familia», sentencia Gutiérrez.

Suscríbete para seguir leyendo