El coste del nuevo trasvase de agua a Cáceres se dobla y queda en 23,8 millones

El presupuesto de las obras del nuevo trasvase para el abastecimiento de agua a Cáceres ascenderá a 23,8 millones de euros, según informó la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT). Esta previsión dobla la que se publicó hace poco más de un año, cuando en el Diario Oficial de la Unión Europea se daba un valor estimado de la nueva captación de agua entre los embalses de Alcántara y Guadiloba de 11,5 millones de euros, fue en el anuncio publicado en abril de 2022 de información previa para que los potenciales licitadores a estos trabajos pudieran ir preparando sus ofertas para el concurso, una licitación que se ha ido retrasando y para la que todavía no hay fecha.

De momento, según detalló la confederación a preguntas de este diario, el proyecto tiene que salir a exposición pública antes de proceder a la aprobación definitiva del documento, paso previo a que las obras pueda salir a concurso. El plazo de ejecución de los trabajos es de 30 meses. El departamento que se encargará de que los trabajos se acometan es la dirección general del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica, mientras que los trabajos se harán bajo la dirección de la confederación.

El agua que consumirán los cacereños a finales de esta década

La redacción del proyecto se adjudicó en 2021 con un plazo de doce meses, el contrato se formalizó en agosto de ese año. Fue una adjudicación a la unión temporal de empresas formada por las empresas consultoras Inyges y Ambling Ingeniería y Servicios. La adjudicación se hizo por 240.000 euros.

El proyecto ha pasado el trámite de información ambiental, la última publicación es de octubre de este año, cuando la dirección general de Calidad y Evaluación Ambiental concluyó que las obras del nuevo trasvase no necesitan una declaración de impacto ambiental ordinaria porque «no se prevén efectos adversos negativos sobre el medio ambiente». Es la misma consideración a la que llegó la dirección general de Sostenibilidad de la Junta de Extremadura, que en una resolución publicada hace un año consideraba que las obras del nuevo abastecimiento de agua «no son susceptibles de afectar de forma apreciable a lugares» que están dentro de la Red Natura 2000 o «a otras áreas protegidas o especies que estén amenazadas».

Con las obras del nuevo abastecimiento se traerá el agua desde una nueva toma que está a veintidós kilómetros y que se hará en las inmediaciones del puente de la A-66 en el río Almonte. La conducción que se proyecta tiene un doble destino, por un lado el embalse del Guadiloba y por otro la planta de tratamiento del agua. 

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