28 años esperando un puente en Cáceres

Más que un puente se ha convertido en un arma arrojadiza entre los dos partidos generalistas: PSOE y PP. Más allá de cuitas políticas (esta semana se ha vivido la enésima), los habitantes de Cedillo y de la Raya luso-cacereña llevan esperando demasiados años una solución. 

Nuevo escollo para el puente que unirá Cáceres y Portugal: la Junta acusa al Gobierno de paralizar el proyecto

Porque la realidad es que el municipio cacereño de Cedillo (en pleno Tajo Internacional), el pueblo más occidental de Extremadura, en el mismo límite con Portugal y situado entre los ríos Tajo y Sever, lleva incomunicado con el país luso desde 1995. Y ya ha llovido. Fue ese año cuando Iberdrola (que gestiona el embalse de Cedillo, propiedad del Estado español) optó por no permitir la libre circulación por la presa construida en la unión de los ríos Tajo y Sever; única vía para moverse entre España y Portugal sin tener que dar un rodeo de más de 100 kilómetros para cubrir una distancia de apenas 8.000 metros entre Cedillo y Montalvao (Portugal). Hay que dar la vuelta por Valencia de Alcántara y cruzar la frontera por Marvão, una situación rocambolesca que aisla ambas fronteras.

Proyecto frustrado

Muchos son los intentos de negociación que han tenido diferentes administraciones para permitir que Iberdrola levante el veto, pero han sido infructuosos. Que se lo digan alcalde socialista de Cedillo, Antonio González Riscao, que ocupa el sillón de alcaldía desde 1987... La denominan como la última frontera privada de Europa y lleva ahogando desde hace décadas el desarrollo de esta zona de la Sierra de San Pedro. «La parte oeste sigue siendo la zona más deprimida y carece de conexión con Portugal», ha indicado en numerosas ocasiones el regidor. «Necesitamos infraestructuras para poder seguir evolucionando y conseguir asentar población en el territorio». 

Y aquí entra el proyecto de construcción de un puente para dar salida comercial y personal a un territorio-isla. El consistorio no ha entrado a valorar esta vez la última cuita política al ton y al son de este proyecto. Pero uno de sus ediles, Miguel Ángel Morales, es el presidente de la Diputación de Cáceres, y ya puso de nuevo en el foco este proyecto cuando tomó el bastón de mando el pasado 1 de julio.

Charo Cordero instó en varias ocasiones a Iberdrola a abrir el puente de la presa a diario, sin resultados

Previamente, como secretario general del PSOE provincial, ha sido Morales beligerante con este asunto. Incluso llegó a calificar de «vengativa» la decisión de la Diputación Provincial, bajo el mandato del popular Laureano León (entre 2011 y 2015); anterior a ese mandato Morales había sido vicepresidente provincial con Juan Andrés Tovar. «En 2011 estaba todo aprobado para construir el puente sobre el río Sever y así comunicar dos países, dos pueblos, dos comarcas, que se necesitan mutuamente para avanzar en materia económica y social», pero los 4 millones de euros concedidos para la realización del puente «fueron devueltos por un PP vengativo que, por entonces, gobernaba y dilapidaba el destino de nuestra provincia», apuntó Morales en junio de 2020, cuando se reabrían fronteras en plena pandemia de covid.

Coste

El ejecutivo de León señaló en su momento que el proyecto se caía porque el coste final doblaba la inversión de 4 millones de euros iniciales, y que la construcción de los accesos disparaba el presupuesto a 8 ó 9 millones de euros.

Con la fallecida presidenta provincial Charo Cordero al frente, la Administración se topó con otro revés: el Comité de Gestión del Programa de Cooperación Transfronteriza Interreg V-A España Portugal (Poctep) 2014-2020 rechazó la financiación del nuevo proyecto de puente. Cuando Charo Cordero sustituyó a León en el Gobierno provincial, en julio de 2015 ya visitó la Cámara Municipal de la localidad lusa de Nisa, recuperando la infraestructura, pero sin conseguir los fondos europeos. Fue entonces cuando instó a Iberdrola a permitir diariamente, y no solo en fin de semana, el tráfico en el puente de la presa de Cedillo. Y lo hizo en numerosas ocasiones. Pero tampoco obtuvo la respuesta deseada. 

Ahora, será el Gobierno central el que gestione la firma con Portugal para un puente que se lleva esperando casi 30 años. 

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