Ajedrez

El Albatros vuela alto en Extremadura

El club cacereño de ajedrez reafirma su excelente progresión con el reciente subcampeonato en la División de Honor extremeña

Componentes del Albatros.

Componentes del Albatros. / P. T.

Pablo Talavera

Pablo Talavera

El Albatros-Peón aislado es un modesto club cacereño que se ha consolidado entre los mejores del ajedrez extremeño. Esta temporada se ha alzado con el subcampeonato en División de Honor, solamente por detrás del dominador en las dos últimas décadas, el Magic Extremadura.

El palmarés del Albatros no para de aumentar y sorprende, tanto en competiciones individuales como por equipos, para sus 19 años de historia: tres podios en División de Honor, siete subcampeonatos de Extremadura, un podio en Primera División y otro en Segunda, trece participaciones en la Segunda División del campeonato de España por equipos, tres participaciones en el campeonato de España de ajedrez rápido por equipos y varios campeonatos de Extremadura en sus versiones de ajedrez rápido y relámpago, además de multitud de triunfos individuales y por edades. Y todo esto sin recibir subvenciones de ayuntamientos, diputaciones o entidades privadas, y con apenas el apoyo anual de la Junta de Extremadura para asistir al Campeonato de España.

El presidente, Enrique Gallardo, fundamenta estos éxitos en «la ilusión y el trabajo duro dentro de un club donde todos tienen los mismos derechos y obligaciones». De los jugadores, Gallardo dice: «somos buenos amigos, una especie de diáspora de extremeños, residentes en diferentes partes del país que se reúnen por internet o en las casas de unos y otros para entrenar, porque carecemos de sede física, pero esto nos permite adaptarnos a horarios y reglas de manera flexible».

Enrique Gallardo que, además de presidente, es jugador, árbitro autonómico y monitor superior de la Federación Española, dice: «soy uno más de entre los nombres del club que ya todos conocen en los círculos regionales de ajedrez como Ángel de Nacimiento o Javier Gómez». Pero cuando a Gallardo se le iluminan los ojos es cuando cita con orgullo el nombre de algunos de los incipientes talentos del club, muchos de ellos femeninos: «Laura Pérez de Vargas; las hermanas Sofía, Susana y Sara de Prada; Carlota Miguel; los hermanos Camino y Pablo Rocha; Zaira Repilado; Jaime Fernández… aunque tendría que nombrar a casi la treintena de jugadores que somos en el club».

Y es que los éxitos venideros parecen asegurados para el Albatros que surca los cielos del mundo del ajedrez, donde el ingenio y la estrategia se enfrentan en cada movimiento sobre el tablero.