La madrugada de hoy, día de la huelga general, se ha desarrollado con tranquilidad en Cáceres.

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Bajo un fuerte dispositivo policial formando un pasillo, los 50 trabajadores de Induyco que decidieron acudir a trabajar lo pudieron hacer bajo el griterío de los piquetes apostado en el exterior y algún enfrentamiento menor. Esta empresa cuenta con una plantilla de 260, según su comité de empresa.

El inicio del turno de noche de Catelsa también se desarrolló con normalidad, así como la salida de los servicios mínimos (un camión) de recogida de basura.

Esta tónica se han mantenido, aunque el acceso al trabajo de los funcionarios en el edificio Múltiples ha contado con enfrentamientos verbales entre los piquetes y los empleados que optaron por acudir a sus trabajos.