Por la recuperación del ferrocarril Ruta de la Plata

En demanda de un tren digno para Extremadura que vertebre el territorio

CONCENTRACION RECUPERACION TREN RUTA DE LA PLATA

CONCENTRACION RECUPERACION TREN RUTA DE LA PLATA

A. Pilar Rubio López

A. Pilar Rubio López

Uno de los recuerdos infantiles recurrentes que afloran en mi memoria son los viajes en tren realizados junto a mi madre, generalmente para visitar a la familia, resolver algún asunto burocrático o realizar alguna compra (modesta, debido a nuestra economía) para algún evento relevante. Recuerdo que llevaba en mi pequeño cabás unos poemas de Carolina Coronado, de José María Gabriely Galán y de Luis Chamizo alusivos al tren para ilustrarme con la belleza de la palabra de los grandes maestros de la poesía. De vez en cuando, mirando por la ventanilla, veía cómo las encinas de nuestra querida Extremadura se dibujaban en el horizonte y soñaba con viajes imaginarios que me transportaban a mundos ignotos, lugares que, por fortuna, pude visitar más tarde con una mochila en la espalda… pero ya nunca los pude realizar en aquel tren, pues mi Extremadura lo perdió por esos avatares injustos del destino.

En aquellos años de mi infancia, la estación de Aldeanueva del Camino rebosaba de actividad. Era emocionante escuchar el silbato del jefe de estación y ver llegar los trenes de viajeros añorantes de encuentros familiares, como los emigrantes que venían de Alemania y desde otros lugares de España. Los asientos eran incómodos pero el camino se hacía corto por la ilusión del abrazo cercano. Aún guardo en mi retina las lágrimas de emoción del encuentro.

Como aldeanovense, emigrante y extremeña, sueño, pido, deseo y reivindico un tren digno para Extremadura que conecte las ciudades entre sí y con Madrid y otras provincias y un Corredor del Oeste para atraer inversiones, favorecer el desarrollo industrial, el fomento de la movilidad y el turismo, y potenciar el trabajo de la juventud para posibilitar el asentamiento y evitar la despoblación

También era divertido ver el trasiego de mercancías en los muelles de carga y descarga de la estación. Todos los olores de los productos de la huerta se mezclaban en un concierto de olfativo y cromático sin igual. Así como los animales que se exhibían en la feria los miércoles, el mercado semanal más importante de vacuno de Extremadura.Años después, gracias a los transportistas profesionales, nuestros productos han viajado por carretera hacia otras provincias españolas y a países europeos minimizando la penuria del aislamiento.

Como aldeanovense, emigrante y extremeña, sueño, pido, deseo y reivindico un tren digno para Extremadura que conecte las ciudades entre sí y con Madrid y otras provincias y un Corredor del Oeste para atraer inversiones, favorecer el desarrollo industrial, el fomento de la movilidad y el turismo, y potenciar el trabajo de la juventud para posibilitar el asentamiento y evitar la despoblación. Los que tuvimos que emigrar por necesidad, no por propia voluntad, no queremos una Extremadura vacía. Queremos que se haga justicia en una tierra rica en historia, patrimonio, productos y gentes honradas y aguerridas, pero tierra olvidada en infraestructuras.

¿Es tan difícil imaginar un tren de viajeros y mercancías con destino al Norte y al Sur de España, que nos conecte con Europa y África, incluso con América a través de Portugal, que vincule el Atlántico con el Mediterráneo? ¿Se imaginan este mundo conectado a través del ferrocarril? Yo sí. Y espero vivir para contarlo.

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