Copa del Rey

El Llerenense cae de pie ante el Leganés

El pepinero tira de pegada para lograr el pase en un encuentro con escasas ocasiones para acabar 0-2

Los jugadores de ambos equipos disputan un balón.

Los jugadores de ambos equipos disputan un balón. / ÁLVARO MAGANÉS

0- Llerenense:  Lolo; Pedro Toro (Diego Vola, min. 72), Mario Ramón, Maikel, Mario Tomé (Dani Martínez, min. 63); Iker San Vicente, Pedro Inglés, Platero (Bayo, min. 73), Pablo Guerrero (Eric, min. 63); Laerte (Gustavo Quezada, min. 63), Juanpe. 

2- Leganés: Dani Jiménez, Nyom, Lalo Aguilar, Josema, Abzi, Julián Chico, Luis Perea, Cissé, Ureña (Diego García, min. 83), Djouahra, Darío Poveda (Solozábal, min. 83). 

Goles: 0-1 Nyom (min. 9), 0-2 Lalo Aguilar (min. 62).

Árbitro: Oliver De la Fuente Ramos (colegio castellano-manchego). Amonestó a los locales Tomé y Pablo Guerrero.  

Incidencias: encuentro correspondiente a la primera ronda de la Copa del Rey disputado en el estadio Vicente Sanz, en Don Benito, ante la presencia de 1.500 espectadores, unos 50 del Leganés.

Fue bonito mientras duró. La manida historia de David contra Goliat en la que siempre gana el primero no fue tal en el Llerenense contra el Leganés de la primera ronda de la Copa del Rey. Eso sí, no se podrá decir que no lo intentó el cuadro extremeño ante un Lega que hizo gala de los motivos por los que domina la categoría de plata del fútbol español a pesar de jugar con un once plagado de los menos habituales. Dos goles en dos jugadas casi aisladas privaron al Llerenense de continuar su sueño copero en un Vicente Sanz que lució un buen aspecto, al menos sobre las gradas. 

El encuentro comenzó con poco ritmo sobre el maltrecho césped del Vicente Sanz y así continuó durante los primeros 45 minutos. El ritmo de juego, anodino en beneficio del conjunto de la Campiña Sur, ayudó a no ver sobre el tapete una oda al fútbol ayudado también por un Leganés que prefirió no asumir excesivos riesgos y que se limitó a hacer valer su condición de equipo de superior categoría para embotellar en los primeros minutos a los de Luismi Álvarez sobre su propio área. De hecho, al poco del comienzo fue Ureña el que casi marca con un centro potente que se estrelló en el lateral de la red para tranquilidad de los ‘locales’. 

Y justo después avisó Pablo Pletero de que la piel del Llerenense se iba a vender cara con una ocasión clamorosa de gol tras aprovechar un balón a la espalda del conjunto pepinero para quedarse ante Dani Jiménez, pero su golpeo se marchó fuera por muy poco. 

La primera ocasión clara del partido fue del cuadro extremeño, pero el Leganés no tenía pensado hacer lo mismo. La primera que tuvo fue para dentro cuando Nyom, en posible fuera de juego, remató como pudo un centro lateral y marcar así el primero. 

El gol, sin lugar a dudas, no trastocó para nada los planes de uno y otro equipo. El Llerenense continuó haciendo su juego y apostó por bajar el ritmo del partido, a lo que el Leganés no hizo oposición. Así llegó otra ocasión del equipo extremeño cuando Platero, de nuevo, mandó fuera por muy poco un golpeo de falta directa desde la frontal del área. 

Todo esto en apenas un cuarto de hora, pero a partir de ahí poco de unos y otros. El ritmo, de nuevo, muy bajo, y las ocasiones escasas. Sólo un golpeo de Poveda desde lejos para los pepineros llevó algo de peligro sobre la portería del conjunto rival en los minutos restantes de la primera parte. 

Segunda mitad / En la segunda mitad salió un poco mejor el Llerenense, al menos en los primeros compases hasta que los madrileños volvieron a asentarse sobre el paupérrimo tapete dombenitense. De hecho, Platero probó fortuna con una volea desde la frontal que se marchó fuera por poco. 

Pero el ímpetu le duró muy poco al Llerenense. En concreto, lo que tardó el cuadro pepinero en volver a aprovechar un centro lateral para ampliar ventaja en el marcador. En este caso fue Lalo Aguilar el que logró rematar un centro medido desde el costado, gol que generó un estado depresivo en un Llerenense que no bajó los brazos en ningún momento, pero que apenas inquietó la portería de Dani Jiménez. 

Solo algunas llegadas más por ímpetu que por juego le permitieron al equipo de la Campiña Sur el mantener viva la llama de la ilusión hasta el tramo final. Primero fue Maikel con un remate de cabeza tímido a las manos del portero y luego Quezada con otro intento que acabó en nada. 

De ahí al final lo siguió intentando el Llerenense, al menos para lograr un gol con el que inmortalizar un partido ya de por sí histórico y que desde luego quedará grabado a fuego en la memoria de toda la localidad de Llerena.

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