al museo helga de alvear y restaurante atrio se unirá el museo del madruelo

Cáceres, paraíso de los amantes de la arquitectura más universal

Premios nacionales de arquitectura convierten a la Ciudad Patrimonio en objetivo de los viajeros

¿Qué tiene Cáceres que atrae a arquitectos reconocidos en todo el mundo para dejar en esta ciudad Patrimonio de la Humanidad testimonio de sus trabajos? Posiblemente, el reconocimiento de la Unesco de 1986 tenga algo que ver, o que sea considerada el tercer conjunto monumental de Europa. Aún es todo un misterio el porqué los genios de  la edificación y la distribución de volúmenes han posado sus ojos en Cáceres para crear espacios asombrosos para los caminantes. Decir que la ciudad es un ‘museo al aire libre’ es un tópico, real, pero tópico, ahora complementado hace pocos años con el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear. La visita a Cáceres ha crecido en alicientes, con una oferta cultural situada en el top ten mundial. Además, muy pronto la ciudad contará con el mejor museo del mundo de instrumentos musicales. El edificio que lo albergará será diseñado por el reconocido arquitecto Francisco Mangado. Cáceres se conformará así como una de las escasas ciudades del país con enclaves diseñados por dos Premios Nacionales de Arquitectura. Continente y contenido van a estar a la misma altura. El resultado de este interés de los genios de la arquitectura permite que la experiencia del viajero en Cáceres roce lo sublime. El turista inicia un viaje al pasado en cuanto cruza el Arco de la Estrella. Entonces comenzará su exaltación sensorial mientras disfruta los palacios de las familais de los Ovando, los Becerra y los Ulloa a la vez que puede toparse con los edificios de arquitectos como Emilio Tuñón y Francisco Mangado, quienes ahora impregnan la ciudad de Cáceres con sus futuristas y funcionales diseños. Edificios religiosos y palacios como el de Toledo-Moctezuma, la Casa de los Moraga o los Golfines de Abajo (que vivieron episodios clave de la historia del país) son exponentes de una arquitectura señorial que durante siglos caracterizó a Cáceres. Además, la visita al interior de algunos es posible, aunque en ocasiones se necesita reservar. En medio de esos volúmenes renacentistas se encuentran luminosos destellos de la arquitectura moderna como el de Atrio, un templo mundial con tres estrellas Michelin que se encuentra en un edificio restaurado por Emilio Tuñón. Tradición y modernidad se enhebran en este perfecto maridaje entre gastronomía y arquitectura. La exaltación de los sentidos es total porque a la propuesta de platos se une el mimo con el que la decoración está cuidada. Por su puesto, en su interior, la famosa bodega de Atrio, tesoro de los amantes del vino y deslumbrante diseño. Muy cerquita de este santuario de los fogones mundiales se encuentra otra maravilla de Emilio Tuñón, quien junto a Luis Mansilla fueron los creadores del edificio del Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear. Abrió sus puertas en 2021, con una visita de los reyes de España y está considerado como el mejor museo de arte contemporáneo de todo el continente. Se encuentra muy bien integrado en el tejido urbano que lo rodea, siendo no solo un espacio para albergar artes sino un elemento más de las señas de identidad de Cáceres y eso se ha conseguido en tiempo récord. La colección de Helga de Alvear adquiere aquí su esplendor necesario y máximo. Arquitectura y arte se dan la mano en otra experiencia única que se ha convertido en argumento de visita de muchos turistas a los que les atrae la vivencia cultural. El colofón a este paraíso de la arquitectura histórica no se acaba aquí, sino que se acrecentará en breve con otro espacio museístico, el Museo del Madruelo, cuyo edificio será realizado por Patxi Mangado.  Contará con una de las más importantes colecciones privadas de instrumentos musicales del mundo, la de la Fontana, integrada por 2.000 instrumentos y piezas de cerámica española. M

¿Qué tiene Cáceres que atrae a arquitectos reconocidos en todo el mundo para dejar en esta ciudad Patrimonio de la Humanidad testimonio de sus trabajos? Posiblemente, el reconocimiento de la Unesco de 1986 tenga algo que ver, o que sea considerada el tercer conjunto monumental de Europa. Aún es todo un misterio el porqué los genios de la edificación y la distribución de volúmenes han posado sus ojos en Cáceres para crear espacios asombrosos para los caminantes. Decir que la ciudad es un ‘museo al aire libre’ es un tópico, real, pero tópico, ahora complementado hace pocos años con el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear. La visita a Cáceres ha crecido en alicientes, con una oferta cultural situada en el top ten mundial. Además, muy pronto la ciudad contará con el mejor museo del mundo de instrumentos musicales. El edificio que lo albergará será diseñado por el reconocido arquitecto Francisco Mangado. Cáceres se conformará así como una de las escasas ciudades del país con enclaves diseñados por dos Premios Nacionales de Arquitectura. Continente y contenido van a estar a la misma altura. El resultado de este interés de los genios de la arquitectura permite que la experiencia del viajero en Cáceres roce lo sublime. El turista inicia un viaje al pasado en cuanto cruza el Arco de la Estrella. Entonces comenzará su exaltación sensorial mientras disfruta los palacios de las familais de los Ovando, los Becerra y los Ulloa a la vez que puede toparse con los edificios de arquitectos como Emilio Tuñón y Francisco Mangado, quienes ahora impregnan la ciudad de Cáceres con sus futuristas y funcionales diseños. Edificios religiosos y palacios como el de Toledo-Moctezuma, la Casa de los Moraga o los Golfines de Abajo (que vivieron episodios clave de la historia del país) son exponentes de una arquitectura señorial que durante siglos caracterizó a Cáceres. Además, la visita al interior de algunos es posible, aunque en ocasiones se necesita reservar. En medio de esos volúmenes renacentistas se encuentran luminosos destellos de la arquitectura moderna como el de Atrio, un templo mundial con tres estrellas Michelin que se encuentra en un edificio restaurado por Emilio Tuñón. Tradición y modernidad se enhebran en este perfecto maridaje entre gastronomía y arquitectura. La exaltación de los sentidos es total porque a la propuesta de platos se une el mimo con el que la decoración está cuidada. Por su puesto, en su interior, la famosa bodega de Atrio, tesoro de los amantes del vino y deslumbrante diseño. Muy cerquita de este santuario de los fogones mundiales se encuentra otra maravilla de Emilio Tuñón, quien junto a Luis Mansilla fueron los creadores del edificio del Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear. Abrió sus puertas en 2021, con una visita de los reyes de España y está considerado como el mejor museo de arte contemporáneo de todo el continente. Se encuentra muy bien integrado en el tejido urbano que lo rodea, siendo no solo un espacio para albergar artes sino un elemento más de las señas de identidad de Cáceres y eso se ha conseguido en tiempo récord. La colección de Helga de Alvear adquiere aquí su esplendor necesario y máximo. Arquitectura y arte se dan la mano en otra experiencia única que se ha convertido en argumento de visita de muchos turistas a los que les atrae la vivencia cultural. El colofón a este paraíso de la arquitectura histórica no se acaba aquí, sino que se acrecentará en breve con otro espacio museístico, el Museo del Madruelo, cuyo edificio será realizado por Patxi Mangado. Contará con una de las más importantes colecciones privadas de instrumentos musicales del mundo, la de la Fontana, integrada por 2.000 instrumentos y piezas de cerámica española. M / EL PERIÓDICO

Juan José Ventura

Juan José Ventura

¿Qué tiene Cáceres que atrae a arquitectos reconocidos en todo el mundo para dejar en esta ciudad Patrimonio de la Humanidad testimonio de sus trabajos? Posiblemente, el reconocimiento de la Unesco de 1986 tenga algo que ver, o que sea considerada el tercer conjunto monumental de Europa. Aún es todo un misterio el porqué los genios de la edificación y la distribución de volúmenes han posado sus ojos en Cáceres para crear espacios asombrosos para los caminantes. Decir que la ciudad es un ‘museo al aire libre’ es un tópico, real, pero tópico, ahora complementado hace pocos años con el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear. La visita a Cáceres ha crecido en alicientes, con una oferta cultural situada en el top ten mundial. Además, muy pronto la ciudad contará con el mejor museo del mundo de instrumentos musicales. El edificio que lo albergará será diseñado por el reconocido arquitecto Francisco Mangado. Cáceres se conformará así como una de las escasas ciudades del país con enclaves diseñados por dos Premios Nacionales de Arquitectura. Continente y contenido van a estar a la misma altura.

Atrio. El edificio diseñado por Emilio Tuñón es un ejemplo de perfecta integración con el entorno monumental.

Atrio. El edificio diseñado por Emilio Tuñón es un ejemplo de perfecta integración con el entorno monumental. / EL PERIÓDICO

El resultado de este interés de los genios de la arquitectura permite que la experiencia del viajero en Cáceres roce lo sublime. El turista inicia un viaje al pasado en cuanto cruza el Arco de la Estrella. Entonces comenzará su exaltación sensorial mientras disfruta los palacios de lasfamiliass de los Ovando, los Becerra y los Ulloa a la vez que puede toparse con los edificios de arquitectos como Emilio Tuñón y Francisco Mangado, quienes ahora impregnan la ciudad de Cáceres con sus futuristas y funcionales diseños.

Edificios religiosos y palacios como el de Toledo-Moctezuma, la Casa de los Moraga o los Golfines de Abajo (que vivieron episodios clave de la historia del país) son exponentes de una arquitectura señorial que durante siglos caracterizó a Cáceres. Además, la visita al interior de algunos es posible, aunque en ocasiones se necesita reservar.

En medio de esos volúmenes renacentistas se encuentran luminosos destellos de la arquitectura moderna como el de Atrio, un templo mundial con tres estrellas Michelin que se encuentra en un edificio restaurado por Emilio Tuñón. Tradición y modernidad se enhebran en este perfecto maridaje entre gastronomía y arquitectura. La exaltación de los sentidos es total porque a la propuesta de platos se une el mimo con el que la decoración está cuidada. Por su puesto, en su interior, la famosa bodega de Atrio, tesoro de los amantes del vino y deslumbrante diseño.

Helga de Alvear. Tuñón y Mansilla diseñaron el museo de arte contemporáneo.

Helga de Alvear. Tuñón y Mansilla diseñaron el museo de arte contemporáneo. / EL PERIÓDICO

Muy cerquita de este santuario de los fogones mundiales se encuentra otra maravilla de Emilio Tuñón, quien junto a Luis Mansilla fueron los creadores del edificio del Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear. Abrió sus puertas en 2021, con una visita de los reyes de España y está considerado como el mejor museo de arte contemporáneo de todo el continente.

Se encuentra muy bien integrado en el tejido urbano que lo rodea, siendo no solo un espacio para albergar artes sino un elemento más de las señas de identidad de Cáceres y eso se ha conseguido en tiempo récord. La colección de Helga de Alvear adquiere aquí su esplendor necesario y máximo. Arquitectura y arte se dan la mano en otra experiencia única que se ha convertido en argumento de visita de muchos turistas a los que les atrae la vivencia cultural.

El colofón a este paraíso de la arquitectura histórica no se acaba aquí, sino que se acrecentará en breve con otro espacio museístico, el Museo del Madruelo, cuyo edificio será realizado por Patxi Mangado. Contará con una de las más importantes colecciones privadas de instrumentos musicales del mundo, la de la Fontana, integrada por 2.000 instrumentos y piezas de cerámica española.