ENTREVISTA | Olmo González Apicultor y pianista

«Tengo más recuerdos del campo que de una sala de conciertos»

Olmo González: «Tengo más recuerdos del campo que de una sala de conciertos»

El placentino Olmo González, se reinventó como apicultor tras estudiar música.

El placentino Olmo González, se reinventó como apicultor tras estudiar música. / CEDIDA

Luis Rollano

Luis Rollano

Natural de Plasencia, se dedica a la apicultura ecológica de manera profesional desde hace cinco años. Fue un giro en su vida, ya que antes de sumergirse en esta experiencia lo que hizo fue estudiar la carrera superior de música de piano. Además, también estuvo dando clases de lenguaje musical y piano durante tres años. Entre los principales problemas del sector apícola apunta, entre otras, a la sequía voraz, la falta de investigación para encontrar soluciones, la importación masiva de mieles de baja calidad de otros países y el incremento de costes por los insumos, tanto en alimentación, como en el combustible.

 ¿Qué imaginaba que sería de mayor?

Desde pequeño me gustaba mucho tanto la música como el campo. Siempre he compaginado ambas pasiones a lo largo de mi vida. Me planteé en su momento estudiar para biólogo, veterinario o ingeniero agrónomo. Finalmente, seguí el camino musical en mis estudios superiores de piano en Badajoz, aunque seguía acompañando a mi padre a las colmenas en fines de semana, puentes y vacaciones. 

¿Qué llegó antes a su vida: la música o la apicultura?

Yo diría que llegaron ambas cosas a la vez. Mi madre siempre ha sido una gran melómana y apasionada de la música y mi padre, cuando yo nací, ya se dedicaba de manera profesional a la apicultura. Podría decirse que tengo más recuerdos de infancia en el campo que en una sala de conciertos. De todos modos, desde pequeño he estado rodeado de cintas de casete y discos de vinilo, todos llenos de buena música.  

¿Los consumidores extremeños apreciamos la miel de calidad?

Creo que todas las personas que conocen a algún apicultor/a saben apreciar el valor nutricional y propiedades de la misma. Hoy, los consumidores no conocen el origen y el porcentaje de cada país que contienen las mieles de mezcla que la industria envasadora y la distribución ofrecen en los puntos de venta. Es necesario que se modifique la norma de calidad de la miel en nuestro país para que se especifiquen ambas cuestiones con mayor claridad.  

Usted es pianista con formación superior, pero decidió dar un vuelco a su vida y dedicarse a la apicultura. ¿Qué le llevó a tomar esta decisión?

Hay circunstancias personales y familiares que le marcan a uno. En esos momentos, es cuando ser valiente y salir de la zona de confort es la mejor apuesta. A día de hoy, utilizo aprendizajes de mi formación pianística, como el esfuerzo, la disciplina y la constancia para conseguir todas las metas que me propongo. He de añadir que ser mi propio jefe me estimula muchísimo. 

Usted realiza la trashumancia con sus colmenas, moviéndolas desde Andalucía hasta Castilla y León, pasando por Extremadura. ¿Cómo es este proceso? ¿Qué aporta esto al producto final?

Trasladar las colmenas no es tarea fácil. En primer lugar, hay que tener vehículos específicos preparados para ello. En segundo lugar, esperamos a que las abejas se recojan en su colmena al caer la noche, y después, las cargamos y viajamos durante toda la noche para llegar a nuestro destino antes del amanecer. Con todo esto, garantizamos biodiversidad con nuestras abejas, polinizando diferentes floraciones y obteniendo mieles de distintos colores, sabores y olores. 

Siempre se habla de la necesidad de que los jóvenes se interesen por el campo, de la obligatoriedad del relevo generacional para agricultores y ganaderos. Usted lo ve en primera persona. ¿Lo tienen fácil los jóvenes para trabajar en el sector primario?

No, cada día se exigen más trámites burocráticos a todos los sectores del campo. La administración está pidiendo una digitalización para el campo y dejando poco a poco de dar servicios en sus oficinas, pero sin que las zonas rurales tengan acceso de calidad a internet. Además, la inversión que hay que hacer es muy elevada y la rentabilidad cada día menor, todo esto añadido a que no todo el mundo está dispuesto a trabajar los siete días de la semana. 

¿De qué manera puede la ciudadanía en general acercarse a conocer el sector apícola?

Hay iniciativas muy interesantes. Por ejemplo, con la empresa Dehesando, cualquier persona que quiera acercarse a vivir la experiencia de ser apicultor por un día y conocer el mundo de las abejas en una actividad interactiva y dinámica. También pueden buscarnos en Instagram en @lasabejasdeolmo.

Actualmente también tiene un grupo de música. ¿Cómo compagina la apicultura y la música?

Siempre he necesitado realizar más de una actividad para, así, oxigenarme. Antes me dedicaba de manera profesional a la música y mi hobby era el campo. Ahora simplemente, le he dado a vuelta: mi actividad principal es la apicultura y mi hobby la música. Me gusta lo que hago, me siento bien, realizado y contento en el día a día.