MUJERES QUE HACEN EXTREMADURA | ROMPEN BARRERAS | Marta González Cordero Especialista en Oncología Médica

«Somos un reflejo de que la mujer está llegando a donde quiere»

Marta González, en los exteriores del Centro de Salud de Investigación Clínica del Área de Salud de Badajoz.

Marta González, en los exteriores del Centro de Salud de Investigación Clínica del Área de Salud de Badajoz. / SANTIAGO GARCIA VILLEGAS

Marta González Cordero (Almendralejo, 1986) es médica especialista en Oncología Médica en el Centro de Salud de Investigación Clínica del Área de Salud de Badajoz. Sobre la evolución del sector, asegura que todas las campañas están «favoreciendo la incorporación de la mujer y la visibilidad de esta en grupos de investigación puntero». Y explica: «Trabajo en una unidad de investigación donde hay dos coordinadoras de estudio, una data manager mujer y una enfermera mujer. En el equipo de oncólogos, somos cuatro ahora mismo de referencia de los que tres somos mujeres. Somos un reflejo de que la mujer está llegando a donde quiere».

¿Qué le llena más de su trabajo?

Siempre me ha gustado la investigación y la parte humana de la medicina y ambas se aúnan en la oncología. Aquí, a pesar de poder aplicar la innovación, es una de las áreas en las que tenemos que abordar de forma integral al paciente. La parte que más me gusta, probablemente, es el poder llevar una consulta puntera con mucha innovación, pero haciéndola cercana al paciente en su totalidad.

¿Cómo es ser investigadora en España?

Los oncólogos que nos dedicamos a investigación clínica tenemos muchas ventajas con respecto a otros. Yo no dejo de ser una médico especialista facultativa, con mi plaza en propiedad y una estabilidad laboral. Aquellos investigadores dedicados a ciencias básicas tienen más dificultades por el tema de que los proyectos y las calidades de trabajo son más dificultosas. En nuestro caso, la dificultad es que los hospitales, pese a que están intentando empezar esa perspectiva, tienen una visión principal clínica. Están más interesados en hacer consulta y no tener listas de espera. A veces olvidan que para ser un buen clínico o un buen profesional también deberíamos dedicar parte de nuestro tiempo a la investigación. 

¿Sería necesario plantear una investigación con perspectiva de género dentro de la oncología?

En el ámbito de la investigación en oncología creo que tiene que verse más desde el liderazgo de la mujer, que es distinto al que ejerce un hombre porque tenemos una forma distinta de enfocar las cosas más que a la hora de centrar la investigación. Por ejemplo, en el cáncer de mama hay muchos problemas que derivan de los tratamientos que la mujer podemos entender mejor que el hombre: problemas de la esfera sexual, fertilidad, en el ámbito psicológico tenemos pacientes que son madres o trabajadoras y tienen que dejarlo por un tiempo. Son aspectos que las mujeres enfocamos diferente, planteamos los problemas de otra forma que un investigador varón. Todavía los líderes y referentes son mayormente hombres. 

¿Por qué le cuesta más a la mujer ocupar esos puestos de liderazgo?

Antes el ámbito médico estaba masculinizado, algo que está cambiando. En oncología, por ejemplo, de cinco residentes somos cuatro mujeres y un varón. Ahora veo muchas mujeres urólogas, estamos colonizando casi todas las especialidades médicas. Como somos jóvenes, creo que en el medio plazo puede haber un cambio en esos puestos de referencia en investigación. El principal problema es la conciliación. Si quieres ser madre tienes que parar un tiempo en el momento más álgido de tu carrera, algo que el varón no tiene por qué hacer.